Cabrito al ajillo
Es un plato típico de la provincia de Jaén, España. Se trata de una receta tradicional que se prepara con cabrito, ajo, aceite de oliva y vino blanco. Se suele servir con patatas fritas y ensalada.
Es un plato muy sabroso y nutritivo, ideal para compartir con familiares y amigos. El cabrito al ajillo de Jaén es una receta muy antigua, que se remonta a la época de los romanos. Se prepara con carne de cabrito, ajo, aceite de oliva y vino blanco. Se suele acompañar con patatas fritas y ensalada.
Es un plato muy sabroso y nutritivo, que se ha convertido en uno de los platos más populares de la provincia de Jaén. El cabrito al ajillo de Jaén es una receta muy antigua, que se remonta a la época de los romanos. Se prepara con carne de cabrito, ajo, aceite de oliva y vino blanco. Se suele servir con patatas fritas y ensalada. Es un plato muy sabroso y nutritivo, ideal para compartir con familiares y amigos.
Cabrito al ajillo de Jaén: Ingredientes y preparación
Ingredientes:
– 1 cabrito de Jaén
– 2 dientes de ajo
– Aceite de oliva
– Sal
– Pimentón
Modo de preparación:
1. Limpiar el cabrito y cortarlo en trozos.
2. Poner una sartén con aceite de oliva a fuego medio.
3. Cuando el aceite esté caliente, añadir los dientes de ajo y dejar que se doren.
4. Añadir los trozos de cabrito y dejar que se doren por ambos lados.
5. Añadir una pizca de sal y una cucharada de pimentón.
6. Dejar que se cocine a fuego lento durante unos 20 minutos.
7. Servir caliente.
Como mejorar esta receta de Cabrito al ajillo
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El cabrito al ajillo de Jaén es un plato típico de la gastronomía española. Para mejorar este plato, hay que prestar especial atención a la calidad de los ingredientes. Utilizar cabrito de buena calidad, ajos frescos y aceite de oliva virgen extra de primera calidad. Esto hará que el plato tenga un sabor único y delicioso.
Además, es importante tener en cuenta el tiempo de cocción. El cabrito debe estar bien cocinado, pero no demasiado. Si se sobrecocina, el plato pierde su sabor y textura. Por último, hay que tener en cuenta la presentación. El cabrito al ajillo de Jaén debe servirse caliente y con una decoración adecuada para que el plato sea un éxito.